El
aire lleva hoy
rumores de canción,
que envía el cielo azul
garganta juvenil.
Ya
canta la juventud;
sembrando va su voz
los pueblos españoles.
Surcos son de su sentir.
Con emoción
de rosas y de paz,
cantando están:
oscenses, escuchad.
Hablan
de lucha,
de trabajo, amor,
justicia y Patria.
Con fe, oscenses, escuchad.
Son
sucesores en valor
de don Ramiro, el monje rey;
honra sin par lograron ser
de monjes y soldados a la vez.
Para pensar en su deber,
que el Fundador les quiso dar
de herencia, canta
toda la juventud.