Me
han preguntado en las filas azules
por qué he venido a formar a su lado,
y he contestado:
–
Porque una vez oí una canción.
–
Canción heroica, de amor, y gloria,
de un perfume viejo de Imperio,
con fuerte ritmo de Revolución.
Era
una noche de cielo de España,
cinco luceros allí la cantaron,
y a mí llegaron
unas estrofas de aquella canción.
Ellas
hablaban de guapas novias
y camaradas que habían caído
con cinco flechas sobre el corazón.
Así,
he venido a las filas azules
por un camino que va a las estrellas;
voy hacia ellas,
porque una vez oí una canción.